Desde 1492 hasta mediados del siglo XVIII, los europeos se apropiaron de innumerables plantas medicinales de América como el tabaco, la quina, la coca, el guayacán o el peyote. Mediante expediciones científicas e interrogatorios, recogieron conocimientos de indios o esclavos, comerciaron con drogas y elaboraron las primeras políticas sanitarias. Al mismo tiempo, inquisidores y misioneros prohibieron el uso ritual de ciertas plantas y encontraron la resistencia de los curanderos. Botánica, fraude y brujería: de los bosques de América a las cortes del Viejo Mundo, este libro narra la historia de la expansión europea como una colonización del saber.

La colonización del saber. Una historia de las plantas medicinales del "Nuevo Mundo" (1492-1750)

Samir Boumediene

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Manual para quemar el liceo

Manual para quemar el liceo

El siglo XX fue un siglo de vapuleos y enmiendas a muchas de las asunciones propias de la modernidad europea. No obstante, pese a que gran parte de su legado fue pasado por la trituradora, una idea permaneció intacta: la idea ilustrada de que la cultura «civiliza», nos libera o nos hace mejores. Este libro, que reivindica a un tiempo la tradición de los estudios culturales y una perspectiva de análisis materialista, nos invita a replantear la vigencia de la noción burguesa de cultura, que todavía sigue siendo promovida por las instituciones públicas y que define los valores y aspiraciones de gran parte de la sociedad.

La propuesta de Jaron Rowan desafía la noción de la cultura como un agente inherentemente emancipador y transformador, al tiempo que muestra cómo esta ha sido repetidamente empleada para mitigar los conflictos sociales y bloquear los procesos de cambio político. La cultura es un medio para moldear los gustos y sensibilidades de las clases medias, convirtiéndose así en una importante herramienta de gobierno social. Al explorar las formas de trabajo, precariedad y subjetividad, a la vez que analiza el ámbito de la estética, este libro pone en crisis muchos de los fundamentos sobre los que se articula la noción de cultura burguesa heredada, con el fin de abrirnos a nuevos paradigmas ecológicos de entender, habitar y vivir la cultura.

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En esta historia alternativa del «largo siglo XX», Raunig analiza las concatenaciones entre arte y política, desde la Comuna de París de 1871 hasta las turbulentas protestas contra la globalización en Génova en 2001, pasando por Sergei Eisenstein, Bretch y Benjamin, los situacionistas, el accionismo vienés y el teatro transgresor del PublixTheatreCaravan, con una coda hasta el 15M y las acciones feministas de la última década.    En esta investigación sobre qué ocurre exactamente cuando durante cierto tiempo se desarrollan zonas de solapamiento entre las máquinas revolucionarias y las máquinas artísticas (sobre qué ocurre a lo largo de la línea de fuga de arte y revolución), siguiendo el arte de fabricar conceptos preconizado por Deleuze y Guattari, Raunig desgrana momentos en los que arte y revolución se suceden sin apenas contacto, otros de concatenaciones negativas de oposición y momentos en los que priman las relaciones jerárquicas de subordinación. Son las concatenaciones transversales, cuando los métodos de la acción política y la práctica artística se infiltran mutuamente y se solapan temporalmente, las que pueden poner en marcha un devenir revolucionario, una máquina revolucionaria con todos sus componentes de resistencia, insurrección y poder constituyente.     Y es que al analizar las concatenaciones de arte y revolución, Raunig despliega además una propuesta concreta de revolución, una que no se limita a la toma del Estado, a partidos que se convierten en aparatos del cierre de la revolución en las instituciones: la música de la revolución social se empieza a tocar en el terreno maquínico-social y consiste en recolectar y ensamblar, inventar y componer socialidad, cooperación social, ecología social.

Arte y revolución. Activismo artístico en el largo siglo XX

Gerald Raunig


La filosofía -afirma Kant en la Crítica de la razón pura- no se puede aprender, a no ser históricamente. En lo que respecta a la razón -sostiene- se puede solamente, cuando mucho, aprender a filosofar. Partiendo del examen de la afirmación kantiana, este libro reconstruye las diferentes posiciones que Fichte, Schelling y Hegel asumen frente a ella. Ante el complejo entramado conceptual que Kant teje alrededor de esta cuestión, las perspectivas de sus sucesores proveen claves para repensar la transmisión de la filosofía, así como su rol político y cultural. Además, brindan herramientas teóricas para cuestionar la tajante distinción entre la historia de la filosofía como mera repetición pasiva y la filosofía como quehacer creativo. Este libro invita, entonces, a reflexionar junto con los principales representantes del idealismo alemán acerca de la noción de filosofía, la posibilidad de su enseñanza y su tarea respecto del propio tiempo histórico.

¿Aprender la filosofía o aprender a filosofar?

Sandra V. Palermo, María Jimena Solé

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El malentendido de la víctima

El malentendido de la víctima expone, analiza e interroga una serie de procesos y fenómenos que dan cuenta de la deriva punitivista de la sociedad, que salta a la vista en el cambio de sentido del término “seguridad”, históricamente vinculado con el acceso al trabajo, la salud y los derechos en general. En el centro de esta mutación Tamar Pitch coloca a la “víctima”, real o potencial, buena o mala, figura que ya no remite a un abordaje estructural de las injusticias sino a la individualización y privatización del sufrimiento. Tal es el contexto en que se invoca a la justicia penal como solución principal, sino única,a los problemas sociales y políticos. Una invocación que no sólo despolitiza y sirve como fachada para la criminalización de la pobreza, la marginalidad y lxs migrantes, sino que también se la identifica en las derivas punitivistas de ciertas agendas feministas. Esta última convergencia, que se inmiscuye en un movimiento cuyo objetivo es la liberación de la explotación y la opresión, exige una interrogación a fondo que desactive esta paradoja y reabra el pensamiento hacia otros modos de justicia.

Editado junto a Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

Con la colaboración del Instituto de Estudios Comparados en Ciencias Penales y Sociales (INECIP) y el Centro de Estudios de Investigaciones de Género (CEIG-UNAM).


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